Mauro Vi llega jubiloso a la portada de Objeto, con un estandarte de éxito y perseverancia.
- Revista Objeto
- 23 feb 2024
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Nuestra Revista - El cantante e influencer, llega en la portada de Objeto digital en este mes de marzo, y en esta edición nos cuenta acerca de su experiencia al estar presente en el mundo de la música.
Por Fernanda Santino
CDMX a, 22 de febrero 2024
En una entrevista concedida a Revista Objeto, el destacado cantante e influencer, Mauro Vi, compartió introspectivamente varios episodios significativos de su vida. Entre los momentos destacados se encuentra el regocijo experimentado al grabar su primera composición, una realización que atestigua la superación de lo que en el pasado parecía inalcanzable.
El relato abordó la etapa en que decidió trasladarse en solitario a la Ciudad de México en la búsqueda de la realización de sus sueños. Aunque este cambio de rumbo se revela como una experiencia enriquecedora, no exentó al artista de la arremetida de inseguridades inherentes a la incertidumbre acerca de su éxito, sustento y la concreción de sus aspiraciones.
Mauro Vi reflexionó sobre el paradigma de ser una persona altruista y enfrentarse a críticas y murmullos de aquellos a quienes ha brindado su apoyo, planteando cuestionamientos sobre la naturaleza de las relaciones interpersonales.
En el ámbito de la vergüenza, rememoró con una mezcla de júbilo y regocijo una anécdota en la que, durante una actuación teatral a una temprana edad, tropezó en el escenario, siendo objeto de la risa colectiva. A pesar de la circunstancia, halló placer en la situación.
Mauro también compartió un momento de profunda frustración cuando, debido a limitaciones económicas, no pudo despedirse personalmente de su prima tras su fallecimiento, desencadenando en él una oleada de rabia y enojo que buscaba liberar de alguna manera.
El impacto positivo derivado de su incursión en las redes sociales también se destacó durante la entrevista, resaltando la oportunidad de materializar sus sueños y agradeciendo efusivamente el apoyo constante de sus seguidores, quienes, según Mauro Vi, constituyen un pilar fundamental y su ancla emocional.
La mudanza a México se reveló como otro punto crucial en su relato, expresando gratitud por haberse enamorado de la cultura del país, que lo hizo sentirse integrado y arraigado.
A pesar de haberse sustraído de las vicisitudes del sufrimiento amoroso, Mauro Vi admitió que su desafío personal radica en aprender a amar de manera saludable, en un proceso continuo de crecimiento y autorreflexión.
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